Médica disidente
A mis 40 años, en octubre de 2020, renuncié a mi puesto de trabajo y a mi profesión como médica de atención primaria. Mi contrato, aunque se preveía de larga duración, seguía siendo de sustituta, pero era, de lejos, el mejor contrato que había tenido desde que finalicé mi formación. Cuando comencé a comunicar mi …